El precio de negar el libre albedrío

Por Timothy Fox

Cada vez que me doy la vuelta, encuentro a alguien que niega que los humanos tengan libre albedrío. Desde los científicos, filósofos a los teólogos, es la nueva tendencia fresca. En realidad, no estamos tomando decisiones libres. Hemos sido programados por Dios o nuestro ADN para actuar de cierta manera y no tenemos más remedio que seguirlo.

libre albedrío

Para ser perfectamente claros, negamos todo tipo de determinismo, ya sea físico o divino. El libre albedrío es lo que pone la libertad en los ministerios del librepensamiento y nuestra piedra angular es el argumento del libre-pensador. Sin embargo, muchas personas todavía no entienden las consecuencias de negar el libre albedrío.

Pero primero, ¿qué es determinismo? Básicamente, significa que no hay libre albedrío. Todas nuestras creencias, pensamientos, acciones, etc. están “decididas” para nosotros, ya sea por fuerzas internas o externas: nuestro ADN, las leyes de la física o una deidad. Eres un tren en una pista fija sin ningún tipo de control. Incluso si piensas que realmente deliberaste acerca de qué calcetines de color ibas a usar esta mañana, que llevabas lo que llevabas y que eras completamente incapaz de hacer lo contrario.

Así que, antes de unirte a todos los chicos geniales, necesitas saber el precio de la admisión. Esto es lo que te costará negar el libre albedrío:

No libre albedrío = no responsabilidad moral

Si cada una de nuestras acciones ha sido predeterminada para nosotros, ¿cómo podemos ser responsables de ellas? ¿O cómo puede un divino maestro de marionetas que te condene por realizar acciones malas si es él quien está tirando de tus cuerdas? El asesino no tiene más remedio que asesinar. El violador no tiene más remedio que violar. Si eres cariñoso y amable o intolerante, sexista, racista, fanático, no tienes ningún control sobre ello. Naciste así, como todos los demás. Nada de lo que hagas es culpa tuya.

Pero ¿creemos honestamente eso? Por supuesto que no. Mantenemos a los criminales responsables de sus crímenes. Alabamos el altruismo y el auto-sacrificio. Solo el libre albedrío hace que esas cosas sean posibles.

No hay libre albedrío = no hay significado, propósito o amor

Los aspectos más básicos de la humanidad dependen de la existencia del libre albedrío: significado, propósito y amor. El verdadero amor no puede ser coaccionado; requiere que las personas libremente y genuinamente se comprometan mutuamente al bienestar. El sentido de uno en la vida se basa en el pensamiento profundo, la reflexión, y en última instancia de un deseo de perseguirlo. Pero sin el libre albedrío; el significado, el propósito y el amor son palabras vacías y huecas.

No libre albedrío = no racionalidad

Como argumenta Tim Stratton en su Argumento del libre-pensamiento, en un mundo determinista, no hay pensamiento verdadero ni racionalidad. Estas cosas se basan en la capacidad de analizar datos, evaluar las pruebas y seleccionar la mejor conclusión.

Después de todo, si piensas que el libre albedrío es una mentira, ¿cómo llegaste a esa conclusión? ¿Revisaste las pruebas y elegiste libremente el determinismo? Espero que veas lo absurdo que es eso. Si no hay libre albedrío, racionalmente no llegaste a creer eso. Estabas decidido a aceptarlo, como todo lo demás que piensas y crees. Nunca llegaste a creer libremente en nada; simplemente estabas decidido a hacerlo. Esto se relaciona con lo siguiente…

No hay libre albedrío = absoluta incertidumbre sobre todo

Si todos tus pensamientos y creencias han sido predeterminados para ti, ¿cómo sabes si alguno de ellos es realmente cierto? No puedes probarlos libremente ni reflexionar sobre ellos. Estás atascado en una incertidumbre total. Si alguna de tus creencias en realidad coincide con la realidad –que es la definición de la verdad– es un gran accidente cósmico, y nunca se sabe la diferencia. Así que si rechazas el libre albedrío, también debes rechazar la verdadera creencia justificada, que significa conocimiento. Sí, si niegas el libre albedrío, también rechazas todo conocimiento.

Otros disparates

Piensa en lo ridículo que es escribir un libro, artículo, blog, o lo que sea contra el libre albedrío. ¿El autor lo escribió libremente? ¿Realmente pensó, reflexionó y eligió cuidadosamente sus palabras para hacer posible el mejor argumento? ¿Y él espera que lo leas libremente y que te persuadas de creer que el libre albedrío no existe?

También puedes escuchar a un negador libre decir algo como: “No hay libre albedrío, pero tenemos que vivir como si hubiese”. Eso es ridículo. Asume que tú tienes la capacidad de elegir vivir de cierta manera. En el momento en que el determinista intenta convencerlo para negar el libre albedrío, se contradice.

Conclusión

Este es el precio de negar el libre albedrío. Si lo rechazas, también debes descartar la responsabilidad moral, el propósito, el significado, el amor, la racionalidad y el conocimiento. ¿Estás realmente dispuesto a dejar esas cosas para abrazar el determinismo? O míralo de otra manera. Si crees que eres un auténtico librepensador, que los humanos tienen verdaderas obligaciones morales y que somos libres de encontrar sentido en la vida, también debes afirmar el libre albedrío.

Y entonces necesitas una cosmovisión que acomode el libre albedrío. El naturalismo no lo reducirá. Tampoco una religión donde Dios determine exhaustivamente todas las cosas en el universo, incluyendo las acciones de los seres humanos. Creemos que la mejor opción es una cosmovisión con un Dios que es completamente soberano, pero ha otorgado a los seres humanos libre albedrío, incluyendo la capacidad de aceptar libremente su oferta de perdón o rechazarlo.

La decisión es tuya.

 


Blog Original: http://bit.ly/2zXeNXz

Traducido por Ruth H.L.

Editado por Jairo Izquierdo

 

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *